Vale, vale. Lo acepto, en mi tuenti he dicho que nada de balances, pero esto es otra cosa y estoy de mejor humor quee.. hace un par de horas. Patético, pero es así. Ultimamente parezco una montaña rusa con mis emociones, y por qué no, el London Eye.
Mi vuelta de Londes ha sido cuanto menos una vuelta a la cruda realidad. Tengo que ponerme a trabajar, y por supuesto, empezaré el último día del año, en cuanto mi manicura termine de secarse. Manicura que esta noche solo unos pocos afortunados podrán apreciar, y es que mi nochevieja no va a ser multitudinaria ni un desmadre. La pasaré con un par de personitas (entre otras) mucho más que esenciales para mí, pero por el momento eso está bien. Ya llegarán mis uvas en la Puerta del Sol y mis nocheviejas cerrando garitos de Madrid o de Dios sabe donde.
De momento, me queda pensar en este 2oo9, que bien mirado (como dirían mis paisanos) tampoco ha sido tan malo.
Ha sido un 2oo9 como mínimo, curioso.
Me he puesto a prueba a mi misma manteniendo una relación de 4 meses a distancia, con sus pros y sus contras, me he apretado el cinturón cuando ha tocado, he sonreido cuando no me apetecía, he dado consejos a quien no se los merecía, he fallado a quien más me necesitaba y he dado importancia a cosas efímeras. Como persona humana que soy, he cometido infinitos errores, la he cagado cientos de veces, pero de cada una de ellas he aprendido algo.
Me ha tocado abrir los ojos, ver cosas que no me han gustado en absoluto, escuchar millones de tonterias que no tendría por qué haber escuchado, pero es parte de mi vida, es parte de la vida.
En ningún momento he estado sola, a pesar de que me haya sentido así, y como muchas veces, haya pensado que mi sitio no está aquí. Pero el mismo número de veces que he pensado eso, me he dado cuenta de que tengo unos amigos que no me los merezco. Que como todos, tengo personas en mi vida que solo reciben y no dan nada, que tan solo se preocupan por ellos mismos y viven ocupados en el qué dirán, pero también tengo gente que está día a día incondicionalmente a mi lado y aunque se cuenten con los dedos de una mano, soy poco más que afortunada por tenerlos en mi vida.
Ha sido un año muy especial en el ámbito teológico, por llamarlo de alguna manera. Me he confirmado. Y todo lo que ello ha significado. Las personas que lo hicieron conmigo y las que fueron a verme. De verás, uno de los días más emotivos de este 2OO9.
Me dieron una beca para realizar un curso audiovisual en una de las mejores universidades privadas de la Comunidad de Madrid y posiblemente de España. Que, por si me quedaba alguna duda me ayudó a decidir definitivamente que ese es el mundo en el que quiero trabajar.
He conocido a muchisima gente este año, he redescubierto amigos que ni me habia molestado en cruzar una palabra con ellos y he podido aplicarme la frase de no juzgues sin conocer.
Me ha tocado tomar muchas decisiones, y no siempre han sido las correctas, pero me han llevado por caminos variopintos en los que tarde o temprano aprenderé algo.
Y aunque pueda que me repita, este año he aprendido el verdadero valor de la amistad. Me he dado cuenta que soy muy amiga de mis amigos, pero he salido asqueda de la cantidad de gente hipócrita que me he echado a la cara a lo largo de este año. Y aun hoy, sigo dudando qué es mejor, si plantar una sonrisa mientras te engañan o ser una borde en profundidad. No sé, quizás el 2010 me ayude a decidir qué debo hacer en ciertas situaciones.
He sentido la adrenalina corriendo por mis venas a 110 km/h en la moto de agua de mi mejor amigo, y a 180 en su coche. He visto a mi equipo de fútbol ganar todo lo ganable (sí, soy del Barça), emocionarme con su juego, llorar de alegría, enfadarme con el árbitro.
Me he ido de crucero con mis amigos, acabo de volver de Londres.
Son pequeñas cosas que han hecho de este 2oo9 un gran año, y aunque al principio mi balance siempre quede negativo, como cada año termino quedándome con lo bueno, que por el momento, por suerte, abunda.
Y por no variar, supongo que debo terminar como siempre, dando las gracias a todas las personas que han formado parte de este curioso 2oo9, y en especial a las que sé que seguirán en el 2010.
Feliz salida y entrada de año.
Y ojalá que el nuevo año venga cargado de cosas buenas.